Nunca me han gustado las despedidas, siempre me gustó cambiar el "adiós" por un "hasta siempre"
Nunca pensé que diría esto pero las ganas de seguir se han cambiado por las ganas de irse, de abandonar, de tirar la toalla. Y puede que sea una cobarde, pero mi sonrisa ya no busca motivos ni mi sueño, las ganas de cumplirse.
He conocido a gente maravillosa, y la que se fue y no volvió, supongo que tendría sus motivos para irse aunque tampoco es que me importe mucho ya, quizá la razón no estuviera de su parte.
Créedme cuando os digo que la ilusión de todo esto, ha hecho que me brille la sonrisa como a una niña pequeña, y en parte ha sido gracias a personas que me han devuelto una parte de mi.
Pero a veces creo que aceleramos sin saber hacia dónde conducimos.
Si me quieres conocer un poco solo tienes que leer entre líneas...
lunes, 1 de agosto de 2016
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario